La parálisis cerebral es una de las afecciones más comunes que pueden ser causadas por lesiones al nacer, ocurriendo en 2.1 de cada 1,000 nacimientos vivos. Cuando ocurre como resultado de negligencia por parte del personal médico, los padres pueden tener derecho a una compensación a través de una demanda por lesiones al nacer presentada contra los proveedores médicos.
La parálisis cerebral se refiere a un grupo de trastornos del movimiento que son permanentes y aparecen en la infancia temprana. La condición es causada por una lesión en el cerebro que ocurre mientras el cerebro se está desarrollando, ya sea antes, durante o poco después del nacimiento. El daño causado al cerebro afecta el tono muscular, la coordinación y el control muscular del niño, el equilibrio, los reflejos y la postura. También puede causar problemas con las habilidades motoras gruesas y finas del niño y el funcionamiento motor oral, lo que a su vez puede afectar el habla.
El hecho de que un niño desarrolle parálisis cerebral no necesariamente significa que ocurrió una lesión al nacer. Por ejemplo, la parálisis cerebral puede resultar de un traumatismo craneal sufrido cuando era niño. Sin embargo, la parálisis cerebral suele ser causada por traumatismos al nacer, infecciones sufridas durante el embarazo, parto prematuro o falta de oxígeno en el cerebro (también llamada encefalopatía hipóxico-isquémica) sufrida durante el parto. Estas lesiones al nacer pueden ser el resultado de negligencia médica.
Los errores médicos que pueden causar parálisis cerebral incluyen la falta de detección o tratamiento de infecciones durante el embarazo, la falta de detección de un cordón umbilical prolapsado, la falta de monitoreo adecuado de la frecuencia cardíaca fetal, la falta de planificación, programación o realización adecuada de una cesárea cuando es necesario y la negligencia en el uso de fórceps o ventosas durante el parto.
Si su hijo sufre de parálisis cerebral y cree que puede ser el resultado de errores cometidos por el personal médico, es importante que hable con un abogado experimentado en lesiones al nacer de inmediato para conocer sus derechos.